y las relaciones laborales del trabajador (Universidad de Cartagena et al., 2015). Por lo tanto, uno
de los objetivos de la ergonomía es la adaptación del trabajo del hombre en relación a sus
requerimientos físicos en su medio laboral, evitando sobre esfuerzos, posturas forzadas,
movimientos repetitivos, o estrés de esfuerzo. Cuando el trabajador siente la incapacidad física
para tolerar esta carga se originan las lesiones músculo esqueléticas (Rivera Guillén et al., 2015;
Fabían MR, Garcés V, Rivero A et al 2019)
Casi todos los padecimientos músculo-esqueléticos guardan relación con el trabajo, y
producen molestias o dolor local y en algunos casos pueden ocasionar limitación de la movilidad,
y con ello obstaculizar el rendimiento laboral (Al Amer, H. S. 2020, Dlungwane, T., Voce, A., &
Knight, S. 2018,18; Gómez Armijos, C., Álvarez Gómez, G., Romero Fernández, A., Castro
Sánchez, F. de J., Vega Falcón, V., Comas Rodríguez, R., & Velázquez, M. R. 2017). Se conoce
que su origen es multicausal, estos trastornos son generalmente crónicos y tienen una historia
natural prolongada, asociada a semanas, meses o años de exposición (Santos HEC dos, Marziale
MH, Felli VEA et al 2018).
Entre los principales factores de riesgo se incluyen: la organización del trabajo (aumento
de las horas de trabajo, exceso de horas extraordinarias, ritmo rápido, falta de recursos humanos),
fuerza excesiva en la realización de determinadas tareas, la repetición de movimientos y posturas
inadecuadas en el desarrollo de actividades (Mohammadipour, F., Pourranjbar, M., Naderi, S., &
Rafie, F. 2018). Estos factores de riesgo tienen una relación causal demostrada en la prevalencia e
incidencia de enfermedades profesionales relacionadas con el aparato osteomuscular y suelen ser
determinantes para la aparición de lesiones a largo plazo si no se adoptan las medidas necesarias
Arrieta, M., & Andrea, L. 2020,17; Mohammadipour, F., Pourranjbar, M., Naderi, S., & Rafie, F.
2018).
Al Amer, en una revisión sistemática reportó que las enfermeras, médicos y los
fisioterapeutas fueron más susceptibles al dolor lumbar, con una prevalencia de 66,9 en enfermeras,
46,5% en fisioterapeutas y 66,8% en médicos; la edad, el índice de masa corporal y el sexo
femenino fueron los factores de riesgo individuales informados con mayor frecuencia (Al Amer,
H. S. (2020)). Los factores de riesgo ocupacional incluyen principalmente actividades relacionadas
con el trabajo que requieren doblar y girar la espalda, levantar y tirar de objetos y manipular al
paciente manualmente. (Oranye, N. O., & Bennett, J. 2018; Universidad de Cartagena, Montalvo
Prieto, A. A., Cortés Múnera, Y. M., Universidad de Cartagena, Rojas López, M. C., & Universidad
de Cartagena. (2015).
Teniendo en cuenta que la población estudiada se encuentra altamente expuesta a presentar
afecciones musculoesqueléticas relacionadas a su trabajo, es de suma importancia esta