negativos, así como generar impactos positivos tanto a nivel económico, social como ambiental.
Dentro de esta categoría, cabe destacar el turismo comunitario que se define como “la
modalidad turística dentro de la cual las comunidades locales legalmente reconocidas realizan
actividades turísticas vinculadas,” (Ministerio de Turismo del Ecuador, 2002). Por un lado, los
turistas comparten una experiencia directa con las comunidades, participando en sus actividades
diarias y viviendo con las familias y por otro lado las comunidades involucradas protagonizan un
rol de mayor importancia para el mejoramiento de sus condiciones de vida y de su propio desarrollo
económico.
La combinación del componente comunitario de la empresa y del componente ecoturístico
es una herramienta indudable para la conservación del medio ambiente, en la medida en que genera
ingresos directos para la conservación de áreas protegidas y vulnerables. A la vez, ayuda a mermar
las amenazas a la biodiversidad y genera ingresos para los actores locales fomentando una mayor
concienciación para las comunidades involucradas. Si bien el turismo es una oportunidad de
desarrollo para estas comunidades, es necesario apoyarles en este sentido, tal como lo plantea por
ejemplo la declaración de Río. (1992) Por lo tanto, resulta de suma importancia articular las
políticas nacionales con las actividades locales de estas comunidades, con el propósito de ir
fortaleciéndoles, por ejemplo, mediante un reconocimiento legal de parte del Estado hacia dichos
proyectos de ecoturismo comunitario.
El área de estudio es un interesante complejo natural, turístico, recreativo, ecológico, y
étnico-cultural, que ha sido declarado bosque protector, donde no se han realizado aún estudios
integrados sobre la cascada y sus alrededores, existiendo algunas informaciones que ponen en
relieve la importancia ecológica del área. En 1983 el antropólogo Oviedo, realizó un estudio de
este interesante lugar con fines de elaborar un proyecto integrado de Manejo, en el cual da a conocer
la existencia de especies Fito zoológicas endémicas posibles de ser estudiadas y protegidas, así
como la presencia de un desequilibrio ecológico marcado, a causa del mal manejo de la cascada,
de las prácticas inapropiadas de la población sedentaria y flotante.
A esto se suma el creciente flujo turístico por la feria de Otavalo, que ha influenciado
negativamente en la Cascada que se encuentra en un área altamente sensible a la contaminación,
depredación y destrucción ambiental poniendo en riesgo el prestigio del lugar como centro
alternativo de turismo ecológico y la preservación ambiental en forma sustentable de las 40
hectáreas que conforman este bosque protector.
La comunidad de Peguche al igual que Faccha Llacta (comunidad asentada en la cascada),
son muy conocidas por su artesanía textil como “Tejidos de Peguche”, música, agricultura, viajes